La huelga convocada por el comité de empresa de la fábrica de Prysmian por el despido de ocho trabajadores ha sido secundada hoy por toda la plantilla de la planta productiva de Maliaño.

El paro de 24 horas responde al mencionado despido de ocho trabajadores apenas una semana después de que la empresa productora de fibra óptica comunicara de manera oficial que daba por concluido un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que todavía no había concluido su vigencia.

Los sindicatos consideran el despido "una medida drástica y unilateral" de la Dirección de la empresa que afecta a trabajadores con mucha antigüedad (el que menos tiene 16 años) y cuando se preveía que se iba a negociar un nuevo ERTE, tras concluir la vigencia del interrumpido bruscamente por Prysmian, para garantizar los puestos de trabajo.

El comité de empresa resalta "la situación de indefensión e incertidumbre" entre la plantilla por la medida drástica del despido de los ocho trabajadores y muestra su temor a que esta situación se repita en poco tiempo, aunque Prysmian ya haya comunicado que por ahora no se adoptará una decisión similar.

Según precisa Vladimir Palazuelos, delegado de la Federación de Industria, Construcción y Agro (UGT-FICA) en Prysmian, "en realidad lo que está implantando la empresa es un expediente de regulación de empleo (ERE) encubierto, con un goteo de despidos y rozando los límites de la legalidad".

Palazuelos reitera que los sindicatos de Prysmian no descartan ningún tipo de movilización más "si la empresa persiste en esta estrategia de recortar plantilla y no apostar por el futuro" de la fábrica de Maliaño.